Empezó muy joven a trabajar en la carnicería de sus padres, que más tarde heredaría y que le serviría para desarrollar sus habilidades con los elaborados cárnicos. Gracias a sus ganas de crecer e introducir nuevas ideas, Ana se ha convertido en la carnicera más reconocida a nivel internacional en elaboración y presentación cárnica, siendo toda una experta en la preparación de embutidos crudos, curados y cocidos de alta charcutería, así como en productos cárnicos, todos ellos con un toque personal que los hacen dignos de exposición.